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El cine europeo es reflejo de las múltiples realidades de Europa y, a su vez, influye de manera decisiva en la creación de sus imaginarios. Es por eso que consideramos que no se lo puede estudiar al margen de su contexto, de las dinámicas sociopolíticas que lo acompañan y de los agentes que influyen en su producción. “Panorama” quiere ser un mapa de estos vectores, una ventana que contemple todos los factores que influyen en la producción del cine europeo.
En primer lugar ofrecemos una panorámica de todos aquellos centros que, como el OCEC, analizan la naturaleza del cine europeo contemporáneo, tanto desde perspectivas académicas (grupos de investigación, centros universitarios) como desde las políticas culturales (entidades vinculadas a los gobiernos, museos), además de portales de información de relevancia. En todos los casos se trata de proyectos que estudian la producción fílmica desde la estética o desde la teoría de la comunicación, y que a partir de sus resultados toman decisiones fundamentales sobre la difusión: programación de ciclos y exposiciones, generación de congresos y debates, etc. Puesto que no dispone de la estructura industrial que sí que existe en otro territorios, como el cine de Hollywood, el cine europeo depende en gran medida de su relación con los centros de investigación y las instituciones culturales, de modo que estos últimos entran de lleno en cualquier observación atenta que se quiera hacer de las dinámicas del cine europeo contemporáneo.
En segundo lugar, los festivales constituyen una de las principales ventanas para la producción europea contemporánea. Las decisiones de sus responsables son claves a la hora de cartografiar la producción europea y sacarla a la luz. Nuevamente, las dificultades económicas e industriales del cine europeo necesitan ventanas que superen los canales tradicionales, y los festivales asumen este papel, que rompe fronteras a partir de determinados criterios de programación, ligados a veces al género cinematográfico (cine negro, cine fantástico...) y otras a determinados temas (política, derechos humanos...). Una relación de los principales festivales del continente se antoja fundamental para estudiar los movimientos de la babélica cinematografía europea.
Otro vector clave en la producción europea, muy ligado a los centros de investigación, es la producción bibliográfica sobre cine europeo. Como hemos señalado antes, concebimos el cine europeo como un territorio donde la investigación no es un factor ajeno, sino un agente fundamental en la difusión de las películas. La producción de conocimiento que se deriva, pues, de tesis doctorales, libros publicados y revistas de impacto incide finalmente en el tipo de cine que se ve y que se produce en el viejo continente. Por otro lado, todas las obras que se interrogan sobre estas cuestiones son puntos de referencia para la investigación académica llevada a cabo en el seno del OCEC, de modo que su recopilación obedece tanto al observatorio de las dinámicas del cine europeo como al estudio del estado de la cuestión desde una perspectiva de investigación.
Si los centros, los festivales y las publicaciones reflejan e inciden en la producción europea, las políticas audiovisuales de los estados juegan, sin duda, un papel básico mediante subvenciones y ayudas. El estudio de cómo estas políticas influyen en los canales de producción, distribución y exhibición es un complemento imprescindible al análisis estético de las obras. Catalogar los filmes europeos estrenados en España es un primer paso para un análisis crítico que radiografíe el mercado de la distribución, sus fortalezas y sus carencias; por otro lado, esta catalogación se concibe como una primera aproximación para estudiar la distribución en España en relación a otros países. A este estudio debe sumar-se, evidentemente, la investigación sobre los flujos de distribución de la televisión contemporánea. El conjunto de estas investigaciones es fundamental para dibujar las principales dinámicas que vive el sector audiovisual en Europa.
El estudio de todos estos factores debe permitir, en última instancia, cartografiar las principales tendencias estéticas que, estudiadas país a país, ofrezcan un nuevo imaginario plural del cine europeo más reciente. Es así como este panorama se presenta como una radiografía de las obras audiovisuales europeas de los últimos años, un libro electrónico de referencia para investigadores y analistas de las dinámicas fílmicas del continente.